Por mucho que nos disguste seguimos al albur de las decisiones de unos descerebrados y eso inquieta al alma más serena.
“…y comienzo el viaje a otro mundo, alejado del tiempo, con una profundad casi espiritual, sin límites.....y las palabras se unen en un solo lugar”
Sólo sé que hay un lugar sin retorno, solo se seguir adelante y soñar transformando palabras en el infinito, desordenar lo ordenado y describir sensaciones que se mezclan con realidades.
En las democracias, las mayorías determinan la elección de los gobiernos e influyen, mediante la opinión pública, en su forma de actuar, pero ni las mayorías políticas ni los gobiernos que en ellas se apoyan son garantía de nada.
“…y la necesidad de sentirse encadenados entre la espera y la búsqueda, esa sensación de placer que es imperceptible a todo, no hay conciencia que pueda describirlo…”
Encontrar en cada rosa su aroma, mirar la pureza de su color, tocar cada pétalo aterciopelado, sentir que hay poesía y solo dejarse llevar.
Como ya sabían los romanos, más leyes no son sinónimo de mejor convivencia, sino de más corrupción, de más opresión y de menos libertad. De agravios comparativos y de dificultad en la gestión.
…y un día el destino, el anhelado, ese destino nos puso a prueba y enfrentó y juntó en un mundo desafiante rozando a veces la extravagancia ¿Se puede escapar de ese mandato divino?
La educación virtual iguala porque aplana. En ella nada crece porque nada puede decrecer. No hay síntoma de perfeccionamiento alguno pues constituye un instrumento convertido en fin.
Cómplices silencios alteran el destino, cambian el rumbo y se encuentra entre miles de miradas… ¿son miradas de miradas?... ¿Es aquella mirada de diciembre?